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16 Agosto 2021 Presentamos la mítica Z900RS SE "Yellow Ball" para 2022

Reeditando uno de los diseños más míticos de Kawasaki de la década de loa 70’s, la Z900RS SE para 2022 estará disponible en la versión clássica "Yellow Ball" del Super Four original de 1972, la Z1.


Aunque es la señal más obvia de esta nueva variación de la Z900RS, los cambios no acaban aquí. Una vez más, la Z900RS SE viene equipada de serie con una impresionante variedad de actualizaciones de alta calidad, incluidos los cambios en los componentes de suspensión y frenos.

Si damos un vistazo rápido en la parte trasera, el modelo SE incorpora un amortiguador Öhlins S46 con ajustador de precarga. Con un cuerpo de aluminio con construcción de un solo tubo, el gran pistón de ø46 mm, además de cámaras internas de aire y gas separadas por un pistón flotante, proporcionan una sensación de agarre y estabilidad muy mejorada.

Además, también se han realizado cambios en la parte delantera con la horquilla invertida de 41 mm, no solo con tubos exteriores de color dorado, sino con ajustes revisados para crear un equilibrio ideal entre la reacción y la posición de la suspensión delantera / trasera.

La frenada también ha experimentado un cambio con la adopción de una pinza Brembo. Los discos delanteros Brembo de ø300 mm están mordidos por pinzas monobloque de montaje radial Brembo M4.32 servidas por una bomba radial Nissin de menor diámetro (hasta ø17,5 mm desde el ø19,1 mm del modelo estándar) que activa la acción de frenado a través de latiguillos metàlicos que proporcionan una mayor potencia de frenado al tiempo que ofrecen una progresión lineal al accionar la palanca.

Estéticamente, la Z900RS SE, que cuenta con las letras "RS" del logotipo del modelo en las cubiertas laterales terminadas en rojo, se diferencia aún más a través de las cubiertas laterales del radiador de alumite negro y la cubierta FI, además de las ruedas de multiradio de color dorado. La "guinda del pastel", por supuesto, es el llamado esquema de pintura "Yellow Ball" que tira de las cuerdas del corazón de los aficionados de la Z1, además de nuevos pilotos atraídos por el creciente escenario retronaked de las décadas de herencia Z única de Kawasaki.